Las propiedades del agua son infinitas y con el paso de tiempo el número de beneficios de beber agua para nuestra salud no deja de aumentar.
Un nuevo estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Illinois (EE.UU.) ha descubierto que aumentar nuestro consumo habitual de agua puede ayudarnos a controlar nuestro peso, reduciendo la ingesta de azúcar, sodio y grasas saturadas.
Así se realizó el estudio
los expertos utilizaron una muestra representativa a nivel nacional de más de 18.300 adultosestadounidenses de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición y pidieron a los participantes que recordaran todos los alimentos y bebidas que consumieran durante un periodo de 3-10 días.
El té y el café no fueron incluidos en esta lista dentro del grupo de bebidas. El agua pura si que estaba incluida.
Los resultados del estudio
Tras analizar la cantidad de agua que cada participante consumió, sobre una base diaria de 2.157 calorías, los voluntarios consumieron alrededor de 4,2 vasos de agua, esto es, algo más del 30% de su consumo total de agua; 125 calorías de bebidas azucaradas y 432 calorías de alimentos no esenciales (bollería industrial…)
Al analizar los datos los resultados fueron bastante sorprendentes y muy positivos respecto a la ingesta de agua.
Todas las personas que aumentaron su consumo de agua de uno a tres vasos al día, redujeron su consumo de energía en 68-205 calorías al día, disminuyeron de 5-18 gramos el de azúcar y 7-21 gramos los alimentos con grasas saturadas.
Por lo tanto podemos decir que el agua es un perfecto aliado contra el exceso de azúcar en sangre y que además nos ayuda a saciar nuestro apetito, sobretodo a la hora de necesitar alimentos ricos en grasas saturadas